Una reciente decisión del Gobierno de Canarias ha hecho saltar las alarmas en el sector de auxilio en carretera. Si hace un año se decidió unificar el color de todos los vehículos de este sector para dotarlo de mayor seguridad, sobretodo, ahora, se ha echado marcha atrás, parece que buscando el beneficio de los gruistas, pero en FEGRUAL (Federación de Grúas de Auxilio federada en FENADISMER) no se lo creen. Estiman que los intereses de otros con más poder han prevalecido sobre los de los transportistas y, lo que es peor, sobre los usuarios de las carreteras.
Hace ya un tiempo que se viene hablando de la conveniencia de que todos los vehículos de asistencia en carretera circulen con el mismo color, amarillo por su mayor visibilidad, y en todo el territorio nacional. Es difícil, pero en Canarias el año pasado lo consiguieron. Los gruístas de auxilio en carretera rotularon sus vehículos de amarillo convencidos, por estudios realizados a lo largo de años, que ese color iba a dotar de mayor seguridad vial a los demás usuarios de la vía cuando una grúa está detenida a menudo en lugares de difícil acceso, peligrosos, escasa visibilidad, haciendo su trabajo, y además, también iba a dar mayor seguridad a los propios operarios de estos vehículos, ya que no es raro que se produzcan siniestros por vehículos que no les ven y les arrollan en el ejercicio de su trabajo, saliendo normalmente bastante mal parados.
Al uniformar todas las grúas con un color, y un color bien visible, los ciudadanos circulando por la vía en la que la misma esté detenida trabajando, ya irían sobre aviso, extremando la precaución.
Pero ahora, el Gobierno de Canarias ha dado marcha atrás. Considera que razones económicas (mayor coste para los empresarios del sector de auxilio en carretera por tener que rotular sus vehículos) son motivos suficientes para dar marcha atrás en esa decisión de hace apenas un año. Nunca han consultado al sector sobre esta marcha atrás.
El sector está convencido, así nos lo transmiten desde FEGRUAL, que son otras las razones que llevan a dar marcha atrás en esta decisión y no es otra que las presiones de las aseguradoras que quieren que los empresarios dedicados a esta labor tengan vehículos rotulados con sus colores corporativos y sus logos, haciendo bastante inoperante el funcionamiento de estas empresas que deben disponer de más vehículos de los necesarios para poder atender las necesidades de sus clientes ya que en caso de un siniestro de un asegurado de la compañía X, solo un vehículo rotulado con los colores y logo de la empresa aseguradora X puede ir a prestar el servicio. Si coinciden dos siniestros en el tiempo de la misma compañía, uno de los dos tendrá que esperar. Y esta casuística se puede multiplicar hasta el infinito.
Como los vehículos los pagan las empresas de transporte de auxilio en carretera, y no las compañías aseguradoras, más factible desde el punto de vista económico es, desde luego, que los transportistas no tengan que tener camiones rotulados para cada una de las compañías aseguradoras para las que trabajan porque con menos vehículos pueden prestar los mismos servicios e incluso ser más eficientes. Porque se dará el caso de tener vehículos parados y vehículos averiados o siniestrados en carretera a los que no se puede atender porque los vehículos disponibles no son de las compañías aseguradoras de los ciudadanos que necesitan la grúa.
Ni es económicamente viable, ni mejora la seguridad vial ni la calidad del servicio. Sin embargo, así es como se han visto obligados, y se siguen viendo, a trabajar estas empresas de auxilio en carretera.