Se ha analizado el impacto de la operación en el sector y se han examinado los posibles solapamientos de las marcas en la venta al por mayor y al por menor.
La Comisión Europea ha aprobado sin condiciones la adquisición de Opel por parte del Grupo PSA, al considerar que la operación, que fue notificada el 30 de mayo, no plantea problemas de competencia en los mercados implicados, por lo que el fabricante francés podrá finalmente hacerse con el control de la filial europea de General Motors.
Para llegar a esta determinación, en Bruselas se ha analizado el impacto de la operación en el sector de la automoción, tanto a nivel europeo como en Francia, y ha examinado los posibles solapamientos de las marcas en la venta al por mayor y al por menor, concluyendo que las cuotas de mercado combinadas son relativamente débiles en los mercados afectados.
La sociedad resultante seguirá teniendo que afrontar una fuerte competencia por parte de otros fabricantes como Renault, Volkswagen, Daimler, Ford, Fiat y diferentes marcas asiáticas.
En este sentido, tampoco se han encontrado problemas en lo que se refiere a los canales de distribución al por mayor y al por menor, dado que tanto Opel como PSA tienen ya distintos canales, y existen otros distribuidores importantes y de peso.