Afortunadamente agosto ha supuesto un pequeño revulsivo en las matriculaciones de vehículos industriales, que venían mostrando una cierta parálisis en los primeros siete meses del año.
En los ocho primeros meses del año se han matriculado 14.282 unidades de vehículos industriales (a partir de 3,5 Tn de MMA), lo que ha supuesto un ligerísimo crecimiento del 1.4% en comparación con los mismos meses de 2016. En agosto, sin embargo, se han matriculado 1.539 unidades de vehículos industriales que han supuesto un ascenso del 12,4% en comparación con el mismo mes del año pasado.
Si vamos mirando segmento por segmento veremos cómo oscilan las cifras y cómo se corresponden con la tendencia del mercado.
En el segmento de industriales ligeros (de 3,5 Tn a 6 Tn. de MMA), se han matriculado 53 unidades en agosto, lo que supone un ascenso del 17,8%. En el conjunto del año, este segmento ha registrado un ascenso del 8,7% con un total de 483 unidades.
En los industriales medios (de 6 a 16 Tn de MMA) se han matriculado 280 unidades en agosto lo que supone una subida del 25,6% con respecto al mismo mes de 2016. En el acumulado del año, este segmento está en cifras negativas, con una caída del 3,8% con respecto a 2016 y 2.373 unidades matriculadas.
Y en industriales pesados tenemos las dos caras de la moneda; en rígidos se han matriculado 294 unidades en agosto con un 36,7% de aumento con respecto a agosto de 2016. En el acumulado, se han matriculado 2.369 unidades de rígidos con una subida del 36,7%. Sin embargo, las tractoras tienen tasas negativas en el conjunto del año, con una caída del 2,8% y 9.648 unidades matriculadas, aunque en agosto sí que han tenido un ligero repunte con 912 matriculaciones y un ascenso del 2,9%.
El comportamiento del mercado de industriales pesados muestra claramente cómo las tractoras están alcanzando techo en su volumen de matriculaciones mientras que los rígidos (tanto de distribución nacional o local, como de construcción) están empezando a remontar (y tienen mucho margen de mejora) al compás de la lenta recuperación económica y de la actividad.